En tiempos ancestrales, según los cronistas, los chasquis consumían yacón para satisfacer su sed.
Actualmente, se le sigue dando el mismo uso durante las faenas de trabajo en el campo y para dar energía. El yacón almacena una clase especial de azúcares que no pueden ser digeridos por el organismo humano. Además, estos azúcares tienen pocas calorías y no elevan el nivel de glucosa en la sangre, lo cual lo hace un producto popular para diabéticos y dietas.
El Yacón también contribuye a:
- Antidiabético, por sus efectos reductores del azúcar en la sangre.
- Reduce el colesterol
- Evita diarreas
- Puede corregir desordenes estomacales bastante comunes como acidez, indigestiones, trastornos gástricos, entre otros.
- Facilita la asimilación del calico (prevención de osteoporosis, fortaleciendo huesos y dientes).
- Estimula la síntesis de vitaminas del complejo B
- Bajo contenido calórico
- Control del estreñimiento, y aumento de la excreción
- Fortalece el sistema inmunológico
- Previene infecciones gastrointestinales
- Regula la presión arterial y previene la arteriosclerosis.